Guárdate de dos enemigos:
tener poco tiempo
y tener demasiado tiempo.
Programar es difícil. No nos vamos a engañar. Es difícil y poca gente lo hace realmente bien.
Por eso un programador es caro. Es muy caro. Hazme caso. He contratado a muchos programadores en mi vida.
Y pocos, muy pocos, valen lo que cuestan.
Porque hay que saber gestionarlos. Y evitar que te arrastren a dos de los destinos más habituales en los nuevos proyectos:
Desarrollos que se hacen con prisas y son frágiles, inestables e inflexibles.
Y desarrollos que se hacen con demasiada calma y son monstruosos, monolíticos y eternamente inacabados.
Domando a la bestia que es la programación
El arte de la programación es la habilidad del hábil codificador de abstraer y concretar la idea de un negocio en el conjunto de instrucciones informáticas que le darán vida propia.
El arte de un líder de programadores es evitar que el arte se convierta en arte abstracto.
Porque los programadores, especialmente los buenos programadores, disfrutan con su trabajo. Les apasiona. Y se dejan llevar. Por la belleza. La arquitectura. La pureza.
Y llevan el negocio a la más absoluta ruina. ¡Woops!
En la justa medida: soluciones necesarias y suficientes
Mi tarea es guiarte hacia la solución correcta: la que un producto en fase de verificación en mercado necesita. Una solución que sea:
- Barata pero no chapucera
- Sencilla pero flexible
- Concreta pero ampliable
¿Quieres más detalles? Estos son algunos de los conceptos que aplico.
#NoCode
El mejor código es ningún código. No puede colgarse. No puede contener errores. No puede quedarse obsoleto. Por tanto siempre intento buscar soluciones que no impliquen desarrollo a medida.
Sí, soy un programador que prefiere no programar.
Open Source
El software de código abierto es una mina de oro, abierta y disponible gratuitamente para que cualquiera pueda usarla.
La aprovechamos. Siempre construyendo sobre los hombros de gigantes.
Web
La web es el presente y sigue siendo el futuro. Es la tecnología que nos permite llegar a más gente. Nos permite validar nuestras ideas con el máximo posible de clientes.
Siempre propongo la Web como plataforma en la que ejecutar cualquier MPV.
¿Te interesa? ¿Quieres que me encargue de desarrollar el prototipo de tu nueva idea millonaria?